Materiales
Cuando coges un reloj y decides ponértelo, lo primero que notas es su tamaño y su peso. El peso depende, sobre todo, del material con el que se fabrican la caja y el brazalete. Todos estos materiales tienen un valor diferente. Empecemos por el material más utilizado para tu reloj: el acero inoxidable. El acero inoxidable es un material perfecto para la relojería por su bajo coste y su durabilidad. Es fácil fabricar una caja y un brazalete de acero inoxidable que resistan el desgaste diario. El acero inoxidable es un material bastante ligero, así que no tendrás la sensación de llevar un ladrillo en la muñeca. Un material que podría darte esa sensación sería el Oro Amarillo o Blanco. El Oro Amarillo es un metal precioso un poco más blando que el Acero Inoxidable, pero mucho más pesado. El color del oro amarillo de 14 y 18 quilates transmite una auténtica sensación de lujo, pero, sin duda, repercutirá en el precio del reloj. Si nos fijamos en un Rolex Datejust 41, los precios parten de los 9.000 euros para un modelo totalmente de acero inoxidable. En cuanto al modelo de oro y acero, los precios empiezan a partir de los 12.000 euros.