¿Cuál es la diferencia entre el Rolex Daytona y el Omega Speedmaster?
Uno al lado del otro, ambos lucen biseles taquimétricos y diseños de cronógrafo de tres contadores, nacidos de la misma necesidad de medir la velocidad. Pero en cuanto a personalidad, no podrían ser más diferentes:
- Rolex Daytona: Una declaración de estilo inspirada en el automovilismo, reconocida por su escasez, su pulcro acabado y sus precios de lujo.
- Omega Speedmaster: Un reloj que acompañó los trajes de los astronautas, con la pura credibilidad de un reloj herramienta y una tenacidad probada por la NASA.
Historia y Legado del Rolex Daytona
El Cosmograph Daytona, que debutó en 1963, tomó prestado su nombre del circuito de Florida. Las primeras ventas fueron flojas, pero la pieza personal de Paul Newman dio la vuelta al guion, convirtiéndolo en un fenómeno de culto. Con el paso de las décadas, evolucionó de ser un reloj de carreras subestimado a un símbolo de lujo. Los primeros Daytona funcionaban con calibres manuales Valjoux, para adoptar más tarde la base El Primero de Zenith (Cal. 4030) en 1988, antes de que Rolex lo fabricara por completo de forma interna con el Cal. 4130 en 2000. Luego llegaron los biseles cerámicos, que acercaron el reloj a un estilo de automovilismo más refinado.
La propia etiqueta "Cosmograph " fue un movimiento calculado. Rolex tenía el ojo puesto en la Carrera Espacial y en la atención de la NASA. Pero fue el Speedmaster de Omega el que sobrevivió a las duras pruebas de la NASA y llegó a la Luna, no el Daytona. Ese rechazo sigue definiendo la brecha en sus historias.